Mandó todo a la mierda y se dedicó a organizar la rabia,
como él decía, durmiendo donde fuera y comiendo si había.
Lo que pasara con él, le importaba un carajo.
Había aceptado su destino cuando supo cuál era,
o lo había elegido, no sé,
pero sin hacer ningún drama con eso,
como si la pobreza y el peligro de morir fueran una fiesta.
Se había dado.
Darse.
Él sabía que no hay alegría más alta.
como él decía, durmiendo donde fuera y comiendo si había.
Lo que pasara con él, le importaba un carajo.
Había aceptado su destino cuando supo cuál era,
o lo había elegido, no sé,
pero sin hacer ningún drama con eso,
como si la pobreza y el peligro de morir fueran una fiesta.
Se había dado.
Darse.
Él sabía que no hay alegría más alta.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Coméntale, igual no voy a leer ni madre.